Un refugio de campo pintoresco y fresco, a sólo 120 kilómetros de la Ciudad de Panamá, encontramos El Valle de Antón. Era originalmente el cráter de un volcán gigantesco que se convirtió en un lago., luego en un pantano y después en llano fértil.
Gente indígena que fueron los primeros habitantes, dejaron varios dibujos en rocas “petroglifos”, que se pueden apreciar en La Pintada.

El Valle ha desarrollado una industria próspera de flores y plantas ornamentales, convirtiéndose el pueblo en un centro para orquídeas. Este pueblo es reconocido por su mercado artesanal de los domingos donde se puede observar las plantas y artesanías del lugar. Hay mucho que ver en El Valle, donde la fauna y la flora son abundantes incluyendo los árboles cuadrados. Es un área excelente para aves de colina.
La Cascada El Macho, el Zoológico del Níspero, las Ranas Doradas son además atractivos, que hacen del Valle un lugar excelente para todo visitante.